
El 25 de Noviembre se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, y en España el próximo mes de diciembre se cumplen 10 años de la aprobación de la Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género. Desde Ganemos Pinto creemos que es un buen momento para recapacitar sobre la importancia de esta ley, sus puntos positivos y sus carencias.
Hasta el año 2004, cuando una mujer acudía a comisaría a denunciar que sufría maltrato por parte de su pareja, se tomaba la denuncia y no se hacía nada más. Si en un contexto de convivencia con un agresor, él amenazaba de muerte a su víctima y esta, temiendo por su vida, decidía denunciarlo, la respuesta de las autoridades consistía en decir que hasta que no se consumara la amenaza no podían hacer nada: no podían tomar medidas de protección, no podían dictar una orden de alejamiento, no podían detenerle. Nada. Tras denunciar a su agresor, una mujer debía esperar varios años a que se celebrara el juicio, debido a la saturación de los juzgados y a que no existían juzgados especiales de violencia de género. Y una vez el juez dictaba sentencia, cuando había resolución condenatoria (que no siempre), el agresor se encontraba con una condena por una falta de lesiones y una multa, sin pena de cárcel (o con cárcel durante unos pocos meses si ya había sido condenado antes) y sin orden de alejamiento durante todo este tiempo.
LaLey Orgánica 1/2004 tuvo el mérito de definir con precisión qué debe entenderse por violencia de género, además de articular toda una serie de medidas, no solo penales, para luchar contra ella. Por primera vez, nuestro ordenamiento dejaba claro que la violencia machista no era un asunto privado y que la misma era el resultado de la desigualdad persistente entre hombres y mujeres. Gracias a esta norma, no solo se han articulado en esta década una serie de instrumentos policiales, judiciales y asistenciales, sino que también se ha ido consolidando una conciencia social cada vez más firme contra los maltratadores.
Aunque la ley de 2004 supuso un punto de inflexión, a lo largo de estos años se ha visto la necesidad de reformar determinados aspectos procesales que dificultan la adecuada protección de las víctimas. Asimismo se ha puesto de manifiesto que es necesario mejorar, en cantidad y calidad, los recursos preventivos y asistenciales. Además, es muy importante que todos los poderes implicados en la lucha contrala violencia de género asuman que ésta no es solo física, sino que también se proyecta en lo psicológico y moral, con frecuencia de manera más grave, aunque sea menos evidente que la ejercida sobre la integridad física.
Sin embargo, desde el año 2010 se está llevando a cabo una política de recortes que pone en entredicho el futuro de estas medidas de protección: se ha eliminado el Ministerio de Igualdad, las partidas dedicadas a políticas de igualdad se han reducido en un 47% tras llegar Rajoy a La Moncloa, la reforma educativa del ministro Wert y la eliminación de “Educación para la ciudadanía” ha suprimido uno de los elementos clave en la educación en igualdad…
Algunos datos
* Una década en la que 613 mujeres han muerto a mano de sus parejas o ex parejas (44 en lo que va de año).
* Desde 2005 hasta el primer semestre de este mismo año, se han dictado 227.101 órdenes de protección y 264.080 sentencias condenatorias.
* Una década en la que más de un millón de mujeres ha denunciado maltrato.
* A pesar de que se acusa a las mujeres de abusar de su condición de víctimas para obtener beneficios en los procesos de separación, la Fiscalía General del Estado cifra en menos del 0,01% las denuncias falsas por malos tratos.
* Según el último Eurobarómetro, 840.000 niños y niñas españoles (el 10% de la infancia del país) viven en hogares en los que se producen agresiones machistas…
Desde Ganemos Pinto creemos que es necesario y urgente avanzar en políticas de igualdad, invertir en más y mejores recursos educativos con el fin de eliminar los comportamientos sexistas que en gran medida siguen dominando las relaciones entre hombres y mujeres y animar a las víctimas de la violencia de género a denunciar su situación; pero sobre todo, ser capaces de crear una sociedad en la que la igualdad sea una base sobre la que se sustente.
“La violencia a la mujer afecta a la mitad de la humanidad, avergüenza a sus estados, deja en absoluta indefensión a la mujer cuando no está protegida y se desarrolla en todos los países. El derecho a la igualdad será siempre relativo mientras no sea real y no comprometa a la integridad de la mujer, porque la igualdad es el eje donde se conectan y tienen sentido los demás derechos. Y no hay mayor desigualdad que la que atenta contra la igualdad. Cualquier estado, cualquier ley, cualquier persona debe dignificar en cada acto que realice a la igualdad para que esta sea real y efectiva. Sin cuestionarla”
Flor de Torres Porras es fiscal delegada de Andalucía de violencia a la mujer y contra la discriminación por identidad sexual.
Teléfono de atención a las víctimas de violencia de género: 016